La Dra. Navarro Yubel, Daniela Betina, cardióloga, destaca la importancia de controlar nuestra presión arterial debido a los graves riesgos asociados. La hipertensión arterial (HTA) es una enfermedad controlable que disminuye la calidad y expectativa de vida, y es la principal causa de muerte en el mundo. Además de afectar el corazón, la HTA incrementa el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
La hipertensión puede llevar al desarrollo de cardiopatía hipertensiva, donde la elevación crónica de la presión arterial aumenta la carga de trabajo del corazón, causando cambios estructurales y funcionales. Esto puede resultar en hipertrofia ventricular izquierda (HVI), donde las paredes del corazón se vuelven más gruesas debido al mayor esfuerzo necesario para bombear sangre. La evaluación de la HVI se realiza mediante ecocardiograma Doppler color, que proporciona información pronóstica y de seguimiento para los pacientes.
Además del corazón, la HTA también afecta la arteria aorta. La hipertensión arterial es uno de los factores más frecuentes para el desarrollo de aneurismas de aorta, que son dilataciones anormales de las arterias debido al debilitamiento de la pared arterial. El diagnóstico de los aneurismas se realiza mediante diferentes métodos de imágenes, como radiografía convencional, ecografía, tomografía y resonancia magnética.
La Dra. Navarro Yubel enfatiza la importancia de realizar controles cardiológicos regulares, adaptados a cada paciente y sus patologías específicas. Estos controles incluyen estudios y tratamientos adecuados, así como la frecuencia adecuada de seguimiento. Mantener una presión arterial controlada y proteger la salud cardiovascular son aspectos fundamentales para mantener una buena calidad de vida.
